miércoles, 2 de febrero de 2011

Siempre contigo, Peter Pan

Wendy, Michael y John son tres hermanos que viven en Londres. Como pasan tanto tiempo juntos, Wendy que es la mayor no deja de contarles cuentos sobre Peter Pan, y a los chicos les encanta. Una noche de verano Wendy que es a la que más le cuesta dormirse, le pareció ver una sombra entrar por la ventana, a ella como estaba tan obsesionada con Peter Pan se le ocurrió que podía ser la suya, era cierto, la sombra de Peter Pan estaba en su cuarto revoloteando de esquina en esquina. Wendy la intentó coger, y al momento apareció Peter Pan junto a Campanilla, buscando la sombra. Juntos consiguieron coger la sombra y Wendy se la cosió a los zapatos para que no la volviera a perder. Wendy despertó a sus a hermanos para que vieran a Peter.
Éste les propuso que se fueran con él y con Campanilla al País de Nunca Jamás, dónde vivían los Niños Perdidos. Campanilla les echó un poco de polvos mágicos para que pudieran volar y así empezaron el viaje hacia Nunca Jamás.



Cuando ya se encontraban cerca del País de Nunca Jamás, Peter les señaló el barco del Capitán Garfio, les advirtió que tuvieran mucho cuidado con el, porque hace tiempo un cocodrilo le devoró la mano y se tragó hasta el reloj.




Cuando llegaron a la isla Peter presento a los Niños Perdidos a Wendy, Michael y John. Muy pronto se hicieron amigos. Wendy cuidaba de los Niños Perdidos, mientras Peter les enseñaba la isla a Michael y John.



Cuando iban por la mitad de la isla con precaución de que no tropezarse con los piratas, porque estos ya tenían noticias de que habían llegado, Michael cayó en una trampa de los Indios, en escasos segundos apareció en jefe Indio y atrapó también a John, por suerte Peter se pudo esconder y no ser atrapado por el jefe Indio. Rápidamente Peter fue a buscar ayuda al refugio de los Niños Perdidos, todos juntos fueron a rescatar a Michael y John. Wendy se quedó en le refugio de los Niños Perdidos descansando por el duro viaje, mientras por los alrededores los piratas buscaban el refugio para capturar a Peter.
Cuando los chicos estaban a punto de rescatar a Michael y a John, los Niños Perdidos también fueron atrapados por los indios. Tras una larga disputa entre el jefe Indio y Peter, los Niños Perdidos consiguieron desatarse de donde estaban atrapados, y mientras ellos corrían, Peter se echó a volar tras los niños perdidos. Cuando llegaron al refugio, Garfio se había llevado a Wendy a su barco, todos preocupados fueron a buscarla.
Los Niños Perdidos se escondieron tras unos arbustos mientras que Peter luchaba contra Garfio. Se oían:
-¡Eh, Capitán Garfio, eres un cobarde! ¡A ver si te atreves conmigo! ¡Eres un Bacalao!.
-¡Te haré picadillo Peter Pan!.



Cuando Peter estaba a punto de tirar a Garfio por la borda, los Niños Perdidos rescataron a Wendy y ataron a los piratas con cuerdas. Finalmente Peter logró vencer a Garfio otra vez y todos juntos llevaron a Wendy al refugio.
Tras un largo banquete de comida y de risas entre los niños, llegó la hora de la despedida, Peter les propuso a los tres hermanos que se quedaran en el país de Nunca Jamás, y ellos aceptaron. Todos muy contentos les aceptaron como tres más en la familia, Peter les dijo:
-Aquí siempre seréis niños, viviréis muy felices con nosotros, y también viviréis muchas aventuras.
A lo que Wendy en nombre de sus hermanos respondió:
-Viviremos siempre contigo, Peter Pan.


FIN

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